jueves, 15 de enero de 2009

"You see right there? That's Gaza"


12 de enero de 2009

Quedan menos de 4 horas para irnos a la frontera de Gaza y ya no hay marcha atrás. Llevamos intentando ir desde que empezó la ofensiva israelí pero no ha habido forma. Parece mentira que ahora estemos acojonadas.
Tres de la madrugada y Sarah y yo intentando camuflar los nervios haciendo como que estudiamos para el examen de árabe del jueves. Por la mañana la nerviosa era yo, pero ahora la que no deja de mirar cuántos Qassam ha lanzado hoy Hamás a Ashqelon es ella. Yo, menos mal, empiezo a verlo más claro, es nuestra oportunidad de ver aquello en primera persona y punto, mejor no darle más vueltas.
Cuando Maxime, que trabaja para una cadena de televisión francesa, nos dijo que podíamos acompañarle a la frontera de Gaza, no lo dudamos, “¿A qué hora nos recojes en la estación de bus de Ashqelon?” fue la respuesta. Sin embargo,ahora no podemos evitar pensar que es más peligroso que nuestra querida Jerusalén, donde no parece que haya guerra y ha reinado la calma, gracias a Dios.
“Por ahora van 22 Qassam”, me dice Sarah. Bueno, pienso, no son tantos si tenemos en cuenta que ha habido días con más de 60 cohetazos. Con un poco de suerte mañana nos caerán cerca pero no encima.
“Por ahora, siete de ellos en Ashqelon”, el tono ya no es tan positivo. “Espero que Maxime nos recoja enseguida, y sino, pues al suelo bien rápido en cuanto suenen las alarmas de aviso”, dice completamente decidida cerrando el ordenador.

Por la mañana llegamos a Tajana Merkazit, la estación de bus, con tiempo suficiente para que la cola del detector de metales y el escaneo de bolsos y maletas no nos haga perder el bus y al poco ya estamos en camino, por fin.
El paisaje israelí, tan bonito como siempre, nos calma. Pero pronto los carteles nos dicen que estamos cerca: Ashqelon, Ashdod, Sderot...ahí la frontera está a tiro de piedra. Pronto dejamos a la izquierda la carretera a Beersheba que está en el desierto de Negev, a unos 40 kilómetros de Gaza, y que tras el comienzo de la incursión israelí se ha unido a la lista de los blancos de Hamás. Los cohetes cada vez llegan más lejos en un país alarmantemente pequeño.
Teniendo en cuenta que los Qassam son de fabricación casera y no son precisos a la hora de apuntar, lo único que te queda cuando suena la alarma son 15 segundos para tirarte al suelo o con suerte, llegar al refugio, y rezar para que no te caiga encima ni a ti ni a tu familia.

Cuando llegamos a Ashqelon, Maxime nos recoje enseguida a las dos y a otros dos amigos suyos también periodistas en Israel. A Dan, el cámara, ya le conocía y aunque no me lo esperaba me alegro mucho de verle. Menudo grupo. Creo que me lo voy a pasar muy bien. Enseguida salta el buen rollo, y Maxime nos pone al día de la situación.
“Os voy a llevar a donde están los medios de comunicación, lo más cerca que se puede de la frontera en estos momentos”, dice al volante. Esta vez, Israel ha decidido que no haya periodistas merodeando y no se puede entrar en Gaza. No lo entiendo. Porque todas las imágenes que nos llegan ahora son de fuentes palestinas, Ramattan News Agency en su mayoría.
Llegamos a la colina donde están los periodistas, fotógrafos, cámaras...de todo el mundo. Es una ONU mediática. Se me despejan las dudas, si es que quedaba alguna, de que espero algún día poder vivir de esto. Las primeras furgonetas que veo son las de AFP y la de Reuters con las parabólicas en el techo y miles de cables por todas partes. El de Fox News, con un moreno que recuerda a solarium, se prepara para entrar en directo, el micro no funciona, “Uri”, le dice al técnico, “They cant hear me!”. En dos minutos Uri lo arregla todo y comienza el espectáculo, perdón, el directo.
Corea también está presente, Italia, más franceses y, por supuesto, CNN, aunque no vimos a Nic Robertson, la superstar de la cadena.
Los Apache y de vez en cuando F-16 que cruzan la barrera del sonido hacen que miremos al cielo, limpio de nubes. Al frente, el famoso zeppelin israelí sobrevolando la franja, siempre vigilante. Por lo demás, el silencio anticipa la batalla que se está librando a unos metros de donde estamos.

La primera impresión de Gaza a lo lejos es que es precioso, parece mentira que un lugar tan bonito esté viviendo un infierno tan espantoso. Al poco rato se escuchan disparos de tanques israelíes y vemos subir hacia el cielo las columnas de humo, densas, muy densas. De vez en cuando los diparos de las metralletas interrumpen alguna conversación pero todos coinciden en que hoy es un día muy tranquilo. “Casi no ha habido ningún Qassam y ya es mediodía”, dice un fotógrafo.
¿Qué hacéis cuando veis los cohetes salir de Gaza?, pregunto interesada, porque a tan poca distancia no sé hasta qué punto los ves llegar o no.
“Si van hacia la derecha es que harán impacto en Asdod. “Hacia allí”, señala Ashqelon, “caen en la ciudad y para la izquierda a Sderot”, dice Maxime. “Lo normal es meterse en un refugio pero aquí, en medio de la colina no hay, así que sólo queda tirarse al suelo”.
“¿En serio?” digo mirando al fotógrafo de AFP , que es un encanto. Me mira divertido, “Como me tire al suelo no hago la foto”. Tiene toda la razón.

Próxima parada: Sderot, que al parecer Tzipi Livni estará allí por la tarde y a Dan le toca filmar. La ciudad está a 11 kilómetros de Gaza y ha sido de las más castigadas por los Qassam, todavía no entiendo cómo se puede vivir en una ciudad donde cada dos por tres hay que ponerse a cubierto. Resultado, refugios anti-Qassam cada pocos metros porque en 15 segundos de margen, si no estás en forma, mejor ni lo intentes.

En el coche, Maxime sube el volumen de la radio, Sarah abre un paquete de Oreo y Brad me cuenta que estudia cerca de Tel-Aviv. En ese momento, el de la radio anuncia que se ha lanzado otro Qassam, inmediatamente Maxime para el coche, se baja y se tira al suelo diciéndonos que hagamos lo mismo y, por supuesto, obedecemos. Todos mirando al cielo a ver si vemos pasar el cohete. Pasan los segundos y nada.

“¿Wanna smoke before you die?”, me pregunta Brad sacando un piti. Me entra la risa. Esto es demasiado surrealista. Y entonces, ¡Boom!, el cohete impacta no muy lejos de donde estamos. La nube de humo nos indica exactamente dónde, parece que es una zona despejada, menos mal.
Nos ha pillado saliendo de la colina en la que están los medios de comunicación así que estamos en medio de un camino de cabras, pero vamos, en cuanto salimos a la carretera empiezan a adelantarnos las furgonetas de las televisiones a toda velocidad, parece una persecución. Esto es de película. Espero que el de AFP haya hecho la foto.

14 comentarios:

  1. Sofía, no lo dejes. Sigue escribiendo, que es impresionante.

    Pero, sobre todo y por encima de cualquier cosa, ten cuidado.

    Un besazo

    ResponderEliminar
  2. Querida Sofía, tiene razón Nico. Ni una imprudencia, no hagas trabajar a tu ángel de la guarda con muchas horas extra. un beso.

    ResponderEliminar
  3. Sofía, mientras estés allí, no dejes de escribir porque es alucinante saber que estás allí, que lo estás viendo/viviendo y que eres tú. Creo que la prensa en España está tan corrompida... Le das el toque humano y por supuesto, para mí, tienes TODA la credibilidad. Sabes que el productor de Camino, la película, dijo ayer en los Premios José María Forqué que otorga EGEDA que ellos (el equipo de la película) comparten el dolor con los niños palestinos al igual que sufrió Camino?? Maldita propaganda. Es que esto parece la URSS. Casi le vomito encima... Ánimo, pequeña, pero por favor, ten mucho cuidado. Informanos!

    ResponderEliminar
  4. Sofía, q crack! Qué pedazo de crónica has escrito! Sigue escribiendo crónicas como esta y ya verás como se van a pelear en los medios por publicarlas!!! 1 besote

    ResponderEliminar
  5. Hi!! Your blog are very nice and more info. I hope follow my blog and please click my google ads.

    ResponderEliminar
  6. Hermanita... Me debato entre decirte que te alejes de todo eso corriendo y, por otro lado, que sigas siendo los ojos y oídos "limpios" de todos los que queremos saber la verdad de lo que está ocurriendo allí... Como dicen todos, sé super prudente, peque!!Te queremos y estamos orgullosos de ti!

    ResponderEliminar
  7. Otra vez la loca de la Sofiiiiiiiiiii!! guapísima ánimo con tu vocación, Miguel Gil decía que quería ser la voz de los que no tienen, sé tú esa voz por todos los que nos gustaría hacer algo por ellos pero el de arriba ha hecho otros planes con nosotros Y sobre todo -hazle caso a tu sister- mucha mucha prudencia que es una guerra.
    Ánimo con el árabe, yo de momento sigo aprendiendo 'balleno' con mis hijos y con Nemo y Dori...
    Te queremos

    Teremari

    ResponderEliminar
  8. Sofía!!! no lo dejes por nada del mundo. Impresionante cómo lo cuentas, haces que imaginarlo sea posible. Ten cuidado y sobre todo, no empieces a fumar!!

    Un abrazo muy fuerte!

    ResponderEliminar
  9. Sofía! Soy Saieda, me ha pasado el Blog cristina sarasola. Tu experiencia no la he leído sino que la he vivido. Tienes una misión importante y la estás realizando! Todos, como he visto, estamos contigo. Nuestro orgullo! Sigue escribiendo para saber de ti. Ten mucho cuidado allá donde te encuentres. Un besazo enorme!! ya tienes otra admiradora!

    ResponderEliminar
  10. Qué pasada, Sofía. Debes estar viviendo una experiencia indescriptible. Exprímela al máximo!!

    ResponderEliminar
  11. hermanita!!!
    me he emocionado leyéndote!!! eres increible!! estamos orgullosos de ti, te queremos!! Dios te ha dado unos dones especiales y tu sabes rendir al máximo. cuidate muchísimo porfa!!!!

    ResponderEliminar
  12. Sofi!!
    Mi más sincera enhorabuena, de verdad.
    Estoy empezando a creer de nuevo en el buen periodismo, mucha gente como tú es lo que nos hace falta. Estrújalo a tope!
    Me uno al clamor popular, cuidate mucho mucho y no hagas locuras!
    Un besazo!

    ResponderEliminar
  13. Sofi!!! q genial!! me temo q voy a repetirme niña.... xo no te la juegues... más q nada xa q cuado vuelvas pueda decir que te conozco!!! jejeje... un besazo y sigue siendo viviéndolo por nosotros...GRACIAS

    ResponderEliminar
  14. Miss! Todo un placer disfrutar del regalo de tus letras. No me quiero repetir como el resto en temas de seguridad por lo que me remitire a decirte que sigas teniendo esa vision tan "Sofi-sticadamente original". Un besazo enorme de una que comparte mas de un recuerdo nazareno contigo :)
    Cristina Al.

    ResponderEliminar